Nuestro Colegio Claret de Madrid ha celebrado durante la segunda semana del mes de marzo su trigésimo primera edición de las Jornadas Culturales. “Queremos que los alumnos que participan de las actividades que durante tres días se proponen en torno a temas solidarios, aprovechen para aprender de otra manera en compañía de sus compañeros y compañeras”, animan desde el centro claretiano. Tres días, por tanto, en los que se rompen los horarios de clases para confrontar a los mayores del centro educativo -en concreto, a los alumnos de Educación Secundaria y Bachillerato- con realidades que, pese a estar bien presentes en nuestra sociedad, no queremos ver.
Así, se han programado diversos talleres, convivencias y excursiones que van desde visitas a ancianos, a presos en las cárceles, o a enfermos de VIH, hasta obras de teatro o mesas redondas. Incluso tienen programado un viaje a Tánger, pequeña experiencia misionera, donde la Congregación claretiana lleva trabajando ya varios años dando apoyo educativo, sanitario y familiar a niños en riesgo de exclusión social.
Unas jornadas que estuvieron centradas en un principio en actividades más del tipo cultural, pero que con el paso del tiempo comenzaron a evolucionar hacia la justicia y de solidaridad universal, tan propia de la Iglesia y de nuestro carisma claretiano. “Los resultados son espectaculares”, recalcan desde el colegio. “La respuesta de los alumnos frente a realidades tan difíciles, auténticas periferias sociales y existenciales a las que se refiere el papa Francisco, llega incluso a determinar la vocación profesional de muchos de ellos”. “Cuando antiguos alumnos hacen memoria de su estancia en el colegio, siempre mencionan estas Jornadas; esta manera de aprender, de convivir, de soñar”, finalizan los organizadores.
